Crónicas de mi vida: Domingo, 28 de marzo de 2010

Cs, 28 de marzo de 2010

"Querido Diario:

Hoy ha sido un día tranquilo, como muy pocos que he tenido en mi vida en estos últimos días. La vida a veces no parece tan negra como puede llegar a ser, hay momentos de claridad, y en esos momentos es cuando uno puede analizar las cosas en frío, ver que lo que uno hizo tal vez pueda estar mal o quizás no, todavía no estoy segura. Yo se que muchas veces yo tomo demasiado a pecho mis problemas, tal vez por eso, porque son míos, y los demás así quieran jamás pueden ponerse en mis pies, sencillamente porque como dicen “cada mente es un mundo”, o sencillamente porque nadie tiene los sentimientos y los pensamientos en la misma sintonía.

Sin embargo me han hecho darme cuenta de una cosa: Nadie merece que yo sacrifique lo más preciado que tengo por nadie, y lo más preciado que puede tener una persona es su vida, aunada a su estabilidad psíquico-emocional. Estoy consciente de que muchas veces esa seguridad, esa tranquilidad se va a tambolear e incluso puede quebrarse, pero uno tiene que hacer que vuelva a solidificarse, y eso se logra aprendiendo a quererse y valorarse primero uno y luego pedir a los demás lo mismo.

Uno tiene que aprender a arroparse hasta donde alcance la cobija, sin olvidarse de que uno tiene la posibilidad de comprar más tela y agrandar dicha cobija hasta donde uno mismo lo permita. Uno no puede ser conformista en ningún aspecto de la vida, pero tampoco puede crearse ilusiones de cosas imposibles, y ahí es donde está mi error, en hacerme falsa ilusiones con situaciones y personas que es casi imposible que vaya a conseguirlas, y es ahí donde hay que empezar, empezar por aceptar la realidad, la cruda realidad, como se presenta, aceptar lo que uno tiene y día a día buscar superarse, y hacerlo pensando en uno mismo, no en lo que los demás querrían de uno, eso a la larga no tiene importancia.

Tal vez no soy una niña, ni una adolescente, pero tengo apenas 25 años de vida y todavía es lo que me queda por delante, tengo una carrera, que aunque muchas veces no la valoren, ahí está, y tengo que aprender a vivir con ellos, superarme, hacerme yo sola. Se muy bien que hace un buen tiempo no vengo siendo yo, la persona que solía ser tiempo atrás, que traigo una carga de sentimientos constante que no me deja relacionarme adecuadamente con nadie, que me ha robado la alegría con la que solía contar, que me ha pasmado la seguridad que debía haberse formado con el pasar de los años, y ahora es muy difícil volver a recuperar todo eso, pero espero y ruego a Dios que pueda hacerlo, ya que lo necesito desesperadamente.

Como me han dicho muchas veces, tengo aprender a quererme, a valorar lo que hago, a dar a conocer mis triunfos y superar mis fracasos, y juro que voy a intentar hacerlo, por mi, por mas nadie, porque yo merezco ser feliz, merezco triunfar y ser mejor persona cada día, y eso sólo por mi, porque a los demás no les importara verme triunfar o verme caer, siempre que no se vean afectado, les da igual. Pero simplemente yo ya no me puedo permitir dejarme llevar por la rutina, por el conformismo, por la depresión, porque un día, tarde o temprano, esto va a terminar por destruirme, haciéndome caer en un abismo del cual me va a costar mucho salir.

Como decía al principio, hoy ha sido un día tranquilo, en familia, y la verdad no me había puesto a pensar en nada más que en el momento, el ahora, eso ha estado bien hasta que he llegado a la soledad de mi habitación, a mi mundo, el cual la mayoría de las veces es tan deprimente como yo, tan vacío como siento mi alma, y verlo así me hace pensar lo difícil que va a ser poder conseguir la tranquilidad y la felicidad que tanto anhelo.

Sólo una cosa pido, no me exijan que cambie y me supere de un día para otro, eso es imposible, necesito tiempo, necesito pensar, necesito analizar cuidadosamente cada decisión que tome, no vaya a ser que sea peor el remedio que la enfermedad. Pero lo voy a hacer, no hay que preocuparse, lo intentaré con todas mis fuerzas y si veo que empiezo a caer de nuevo o a hundirme mas de lo que pueda encontrarme gritaré hasta que alguien pueda ayudarme desinteresadamente, simplemente porque le nazca y porque quiera hacerlo, sin verse obligada ni nada por el estilo, ese día, esa persona será recibida con los brazos abiertos.

Por ahora es todo, espero pueda cumplir los propósitos aquí plasmados y no que esto quede en letra muerta, y prometo mas adelante irte contando mas de mi y de mi vida (espero no te resulte muy aburrida)

Buenas noches, querido diario"

Jessika….