Crónicas de mi vida: Lunes, 05 de abril de 2010

Cs, 05 de abril de 2010

“Querido diario:

Hoy paso nuevamente a dejar unas pocas reflexiones sobre mi vida, como yo le he puesto ‘Cronicas de mi vida’. Gracias al cielo me he sentido un poco mejor, mi ánimo no ha estado por el subsuelo como muchos otros días, y eso creo que me hace sentir que puedo llevar mejor mi vida, mis cosas. La semana pasada, gracias al decreto de días feriados (con el cual no estuve muy de acuerdo, pero eso no viene al caso), me fui unos días con una amiga y su familia a Higuerote (playa), y de verdad que me sirvió de distracción, pensé en unas cosas, reflexioné en muchas otras, me relajé, me dejé llevar por el momento sin preocuparme sobre lo que me depará el destino, los días, la vida, únicamente pensando en el ahora, el momento vivido, llenándome de buena vibra, de sol, de calor, dejando atrás el frío en el que estaba sumergida mi rutina, despejando la mente. Tuve mi mente apartada de él, de mi adorado tormento, de la razón de mi amargura. Y me sentí bien. Más que bien. A parte de quitarme el hermoso color apio que tenía en mi cuerpo. Y como dije anteriormente, estoy aprendiendo a pensar en mi, a llevar la vida a cómo va viniendo, a no rendirme ni dejarme pisotear o menospreciar por nadie. No es fácil, pero lo estoy intentando, con esfuerzo y constancia. Como dicen, el que persevera vence.

Pero lamentablemente nada es eterno en la vida, y tuve que volver a la rutina, pero volví renovada, con otra visión, la cual espero que se mantenga, con ganas de seguir adelante, de vivir, de componer mi vida, de seguir mi vida, y estoy segura de que algún día tendré cosas que valgan la pena, que me hagan pensar ‘Soy Feliz’, por ahora seguiré buscando, indagando, hasta dar con ellas, o simplemente dejaré que el destino decida… como siempre he pensado: Las cosas, buenas o malas, siempre las buscamos, la diferencia está en la forma que las aprovechamos.

Se que me va a costar salir adelante después de toda la depresión que he tenido en mis días, se que tal vez en algún momento tendré que gritar ‘Ayuda’, pero de una cosa estoy segura, quiero lograrlo, quiero hacerlo, quiero ser feliz, y hasta que no esté en paz conmigo misma, hasta que no aprenda a amarme a mi misma, a aceptarme, a conocer mis límites, no lo voy a lograr. Y esto empieza por empezar a rodearme de gente que me quiera de verdad, que me valore, que me entienda, que me comprenda, no que esté conmigo por estar, no que me diga ‘amiga’ porque compartió un momento nada mas, no que me diga ‘te quiero’ cuando en realidad no lo siente… si es así, hazme un favor, ahórrate las palabras y el esfuerzo, que de verdad no le haces ningún bienestar a mi vida, ni a mi mente, ni a mis sentimientos, ni a mi corazón, y TU, si TU, por favor, se sincero contigo mismo y preguntate ¿Alguna vez te importe de verdad? Si la respuesta es positiva, lo siento, pero nunca lo demostraste… y creo que puedo empezar a decir que estoy mejor así, sin ti, sin ser la que era cuando estaba contigo, por decirlo de alguna manera, y te agradezco por abrirme los ojos, la mente. Por ti empecé a cambiar… Gracias…

Hoy no tengo mucho que decir, no hay nada contundente o avasallador, simplemente un paso a la vez, asi se van construyendo mundos, paso a paso. Y creo que yo he comenzado a darlos, como los niños, sin mirar atrás, sólo pensando en mi, en mi futuro, en mi destino…

Nos vemos en otra oportunidad, y gracias por escucharme incondicionalmente

Buenas noches, querido diario

Jessika…”